Rita Neumann: "Desde chica tuve facilidad para el dibujo, probablemente mi timidéz y capacidad de observación hizo que desarrollara un mundo interior en el que me sentía cómoda y podía fantasear a gusto, un poco como el Felipito de Mafalda que hace un mundo imaginario de cada hecho de la realidad para acomodarlo a sus necesidades.
Mi primer contacto con el vidrio fue hace unos 22 ó 23 años, cuando me fasciné con unos vitrales que había echo
Chagall para el Hospital Hadassa en Israel, yo ya amaba su pintura, y me conmovió la belleza y emotividad que transmitía a travez de los vidrios esmaltados.
Ahí fue que empecé a estudiar vitral.
Mi elección del vidrio como material se debió probablemente a mi curiosidad por conocer el proceso que lleva a realizar un producto, ya que yo venía de la pintura , donde se ve el resultado en el momento, pero en el vidrio al principio todo es una sorpresa, y luego , con el tiempo la alquimia del material te lleva a seguir investigando, y corriendo cada vez más riesgos técnicos para lograr plasmar una imagen.Y su belleza innata, la luz y la transparencia que posee, y esa fragilidad que hace que aprendamos a tratarlo con delicadeza.
Comencé a estudiar en 1980 en el taller de
Carlos Hertzberg. Ahí incursioné en el vitral tradicional de varilla de plomo y cinta de cobre, también aprendí la magia de los esmaltes, trabajé varios años en solitario en mi taller, y fue en el momento que conocí a
Mabel Waisman cuando realmente descubrí lo que pasaba con el vidrio en el horno, y a investigar con rigurosidad para poder desarrollar mi imaginación. También aprendí mucho de la obra de artistas que admiro, como
Sol Abadi, y
Silvia Levenson.
Tuve el privilegio de asistir a su taller particular durante 2 años y embeberme de su generosidad y conocimientos, así como de su proceso de trabajo, siempre impecable .
Transité por diferentes técnicas de trabajo, que fuí modificando de acuerdo con lo que quería expresar, por lo general comienzo modelando con arcilla, para seguir el largo proceso de la moldería y llegar al vidrio.
Cuando necesité realizar los cuerpos masculinos y femeninos, en ausencia, se me ocurrió hacer ropa sin cuerpo pero con la forma del mismo sugerida en él, en ese momento usé como técnica el relieve, que calcaba mejor lo que yo quería transmitir, así aparecieron las camisas con corbatas volando, y las enaguas.
Pero luego necesité más peso y consistencia en el vidrio y comencé con la técnica de casting, siempre modelado en arcilla, con matrices y moldería.
Ahora estoy usando la imagen de la rosa como sujeto, y por otro lado formas en el espacio que contienen partes del rostro.Veremos que sale de todo ésto, empiezo con una idea, y busco el camino para desarrollarla, y hasta que no termino el proceso estoy sumergida en él tratando de resolverlo, desde lo técnico y lo emocional. Y que maravilloso es si cuando uno abre la puerta del horno después de esas largas horneadas todo salió como tiene que ser, y si no, vuelta a empezar...
El vidrio tuvo un boom hace unos años, sobre todo en su aspecto más comercial, pero poco a poco una camada de artesanos y artistas fue buscando diversidad y originalidad en su producción. Pero, en el mercado del arte, al que yo apunto, todavía no es reconocido en su singularidad.
Yo, en lo personal, después de haber participado en certámenes específicos del vidrio, y habiendo recibido la aceptación de mis trabajos a través de premios y distinciones, busqué abrirme paso en galerías de arte, en las que expongo y ferias de arte, como Arte Clásica, y Expotrastienda, en las que me han invitado a participar.También esta herramienta fabulosa que es Internet , que te lleva a cualquier parte del mundo. Porque creo que la obra de un artista no se completa sin la mirada del otro, que tus sensaciones y emociones lleguen a tocar la sensibilidad de otra persona, es lo más fascinante de este lenguaje."