Esta exposición nos invitó a perdernos en la oscuridad, a encontrar la salida de un laberinto, guiándonos por los juegos de luces de las obras de Julio Le Parc, avanzamos a oscuras por las distintas salas, exploramos diferentes puntos de vista hasta encontrar nuestro propio camino.
El espacio mágico creado por este gran artista, nos devuelve a la infancia, nos cautiva con su juego y logra abstraernos del resto del mundo. Nos sumerge en un espectáculo multisensorial, nos invita a participar, nos integra a su obra, no ya como meros espectadores, sino como partícipes.
La exposición muestra los aspectos principales de la obra de este artista: su estudio intensivo de la luz en movimiento. Es una gran muestra de 32 instalaciones cinéticas y lumínicas ya presentada en Suiza, Colombia y México. Las piezas expuestas, en su mayoría de la década del 60, pertenecen a la Colección Daros Latinoamérica, la colección de arte contemporáneo latinoamericano más importante de Europa.
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